lunes, 8 de abril de 2024

Las cualidades blandas en el entorno laboral…

 

Los jóvenes en los tiempos actuales se enfrentan a grandes retos laborales. Por un lado tienen que hacer un esfuerzo colosal para conseguir un empleo, que en la mayoría de los casos, si lo obtienen no pasa de ser un trabajo con una duración corta (ya que los empleadores se esmeran en no dar contratos permanentes) y con un salario mínimo; por otra parte, tienen que buscar varios títulos universitarios para competir, y al final quedan en lo mismo: realizando un trabajo sencillo, pero, con títulos universitarios colgados en la pared.

Y para rematar a esta generación joven que anhela superarse por medio del trabajo, ahora cada vez con más contundencia reciben la noticia de que la Inteligencia Artificial (IA) hará muchas tareas que en este momento hacen los colaboradores de las empresas; es decir, que antes de que termine esta década habrá una reestructuración de los puestos de trabajo.

En conclusión, a partir de ahora, los jóvenes tendrán que hacer un mayor esfuerzo para conseguir empleo y para mantenerse en éste; ya que tendrán que aprender a trabajar con la IA y a desarrollar aquellas cualidades que les den un poco de ventaja en medio de los cambios que ya se están implementando en las grandes empresas  (Inteligencia Artificial).

Según los expertos y la misma inteligencia artificial  (cuando se le consulta), los colaboradores que aprendan a utilizar las “cualidades blandas” para lograr mayor eficiencia; además, de resolver los problemas por medio de las “relaciones humanas”, en el entorno laboral, serán los trabajadores que las empresas retendrán, a pesar, de la implementación de la IA.

Las cualidades blandas van más allá de los conocimientos académicos y técnicos de un trabajador. Son las características de cada ser humano, que lo definen como individuo y le facilitan interactuar de manera positiva con los demás semejantes frente a distintas situaciones.

Tolerancia al estrés, trabajo en equipo, resolución de conflictos, control de la inteligencia emocional, habilidades de comunicación y persuasión, liderazgo, administración del tiempo, toma de decisiones, creatividad, buen trato al cliente, ética, compromiso e integridad: son algunas de las competencias blandas más buscadas por las empresas en la actualidad.

Por: Eric Aragón

sábado, 20 de enero de 2024

El impacto de los valores en el desarrollo del Estado

Existen muchos trabajos de investigación realizados por especialistas en el campo de la psicología, criminología y otras ramas relacionadas con el comportamiento humano, que demuestran que la ausencia de valores en el entorno familiar influye más en la conducta antisocial de los adolescentes que otros factores sociales.

De lo anterior se concluye que si los jóvenes con problemas de conducta no son tratados a tiempo, se convertirán en ciudadanos indiferentes a las responsabilidades que deberán asumir como parte de la sociedad donde se desenvuelven.

Esta es una de las razones que explica el comportamiento negativo de la clase política y de un gran porcentaje de la población menor de 45 años.

El origen de la corrupción con todas sus caretas, es que esta generación ha remplazado los valores tradicionales y universales, tales como el respeto, la disciplina, puntualidad, honradez, esfuerzo, trabajo y unidad familiar -por mencionar unos cuantos- por un código nuevo de valores; donde se destaca la vanidad, la presunción, el desenfreno, el no me importa con los demás, la belleza física, el dinero, los bienes materiales, el menor esfuerzo y el “ juega vivo”; es decir, conseguir dinero y bienes materiales, aunque se violen las leyes y se avasallen a los demás.

La tendencia en estos últimos años son los escándalos y la incapacidad de los gobiernos de darle solución a los problemas de la sociedad, que en gran parte son las mismas necesidades de siempre y otros problemas que se suman producto del avance tecnológico, del crecimiento poblacional, de los conflictos mundiales y la complejidad económica y social que vive el mundo.

Ya no se puede aseverar que estos conflictos son propios del tercer mundo o de las naciones menos desarrolladas. En la actualidad hay tantos problemas de corrupción, incapacidad gubernamental y problemas sociales en las economías en desarrollo como en los países llamados del “primer mundo”.

Mientras la sociedad no regrese a la práctica y enseñanza de los valores tradicionales en el entorno familiar, en las escuelas y universidades, un porcentaje significativo de la clase política seguirá siendo corrupta e incompetente.

Por: Eric Aragón