sábado, 4 de febrero de 2023

La fuente de poder...

Seguro que aquellas personas que lean el título de este artículo pensarán en el dinero, la política, las armas, algo mágico o un lugar en el planeta donde se tenga que ir…

Nada de lo anterior puede constituirse en una fuente de poder que ayude a la humanidad a enfrentar y resolver sus problemas de la mejor manera.

El poder verdadero que requiere un ser humano es aquel que le dé un equilibrio emocional, mental y espiritual. ¡Así como lo lee…! Si un mortal tiene paz y equilibrio en su interior, será capaz de razonar y actuar con sabiduría y serenidad frente a cualquier problema que tenga.

Lo maravilloso de este poder es que está al alcance de todos, porque no es un monopolio ni exclusividad de nadie. Simplemente está allí, en cualquier lugar y momento, sólo tenemos que buscarlo.

La clave para solucionar todos los problemas, ya sean individuales o colectivos, es razonar de la mejor manera posible para buscarles alternativas de solución que traigan los mejores resultados.

Se necesitan elementos como la tolerancia, paciencia, bondad, desprendimiento, solidaridad, fe, persistencia, sabiduría; no ser orgulloso ni vanidoso y pensar en los demás. Si cada persona desarrollara estos factores en su interior, serían mejores individuos, amarían a la familia, tomarían siempre decisiones sabias y evitarían tantas guerras y conflictos que traen muchas desdichas y muertes a la humanidad.

Ahora viene la pregunta clave. ¿Cómo desarrollo estos elementos en mi interior? Existen únicamente dos caminos para obtener y desarrollar los factores mencionados, que le darán al ser humano el equilibrio mental, emocional y espiritual que necesita para enfrentar con fe, paciencia y sabiduría todos los problemas de la vida y salir victorioso… La Oración a Dios y la Familia, representan la fuente de poder verdadera y efectiva que debe buscar todo mortal… No hay otro camino.

Por: Eric Aragón

 

domingo, 1 de enero de 2023

Los días se acortan… ¿Qué hará usted?

 

Con frecuencia se oye la expresión “el tiempo pasa rápido”. Hace varias décadas esta expresión era propia de aquellos mortales que trabajaban muy duro y el tiempo no les alcanzaba para terminar sus labores diarias; sin embargo, hoy día se tiene otra realidad que atemoriza a muchos.

No hay que hacer un gran esfuerzo para que alguien en la actualidad –hasta los niños- perciba que los días pasan rápido. Y ya no es exclusivo de quienes desean prolongar el día para seguir trabajando; todos desde el que se ocupa en algo como el desocupado, perciben que los días, semanas y los años se acortan. Pareciera una utopía, pero es una sensación que tienen cada vez más personas.

La Biblia también presenta una evidencia contundente para los que profesan la Fe Cristiana. En las Sagradas Escrituras se indica que en los últimos tiempos los días serían acortados. Y en efecto, aunque haya escépticos, “así está ocurriendo”.

El problema que está acarreando este suceso extraordinario, es que a muchos mortales se les está desvaneciendo la vida con todos los sueños sin realizar.

Por fin cuando se quitan la venda de los ojos millones de seres humanos, se dan cuenta que aquellos años que debieron aprovechar para comprar una casa, estar con los hijos, lograr una superación profesional, encontrar el verdadero amor o valorar a la familia, entre tantas otras cosas, “QUEDARON EN EL TRISTE RECUERDO”. Sólo queda llorar y esperar el final de la vida, y para muchos el desenlace de su vida será peor, porque no tendrán a Dios.

La buena noticia es que millones y millones de jóvenes, todavía tienen la oportunidad de corregir los errores, antes de que en un abrir y cerrar de ojos, la vida se esfume.

Por: Eric Aragón

sábado, 5 de noviembre de 2022

La inmadurez de la juventud

 

Es doloroso ver como los jóvenes están siendo arrastrados por las corrientes modernas, que van en contra de todo los valores que unen a la familia y dan bienestar al ser humano.

Hoy día los medios modernos y sofisticados como el Internet, las redes sociales, la radio, televisión y otras técnicas audiovisuales, prácticamente han realizado un lavado de cerebro masivo, sobre todo dirigido a la gente joven, sin dejar de mencionar que millones de personas con más edad están cayendo en este abismo de desorden y antivalores.

Y no vamos a polemizar en cuánto a que son valores sanos. Simplemente llamemos valores a las prácticas o reglas que unen a la familia en amor, tolerancia y comprensión; a las que traen bienestar personal y superación, y todas aquellas (prácticas) que respetan las reglas impuestas por la naturaleza y lo más sagrado, el respeto a las normas cristianas, cuyo eje central es la enseñanza de Nuestro Señor Jesucristo, el Salvador del mundo.

¿Por qué los jóvenes son presa fácil de lo negativo? Porque no han alcanzado una madurez mental a medida que avanzan en edad. Si carecen de madurez mental, entonces el análisis que hagan frente a las diversas situaciones será pobre, muy superficial. “Se tragan todo lo que ven y oyen", sin un correspondiente análisis para determinar que es bueno y que es malo; qué conviene y que no. Y es aquí donde los medios masivos modernos hacen su trabajo, llenándoles la mente de modas, vanidad, lujuria, ideas satánicas disfrazadas de buenos argumentos, etc.

Pero, cuando estas corrientes dañinas se topan con un joven que ha logrado la madurez mental como debe ser, este joven simplemente coloca todo en una balanza para determinar, mediante el análisis qué pesa más: lo que trae bienestar o problemas; y en base a ésto desecha lo malo y retiene lo bueno y sigue adelante…

Por ejemplo, un joven con mente superficial, fácilmente se pondrá un tatuaje, piercing; asistirá a fiestas donde el licor, las drogas y el desorden hacen de las suyas o mirará como algo bueno todo lo inmoral y anticristiano, porque le hacen creer que todo es ¨moda¨ y que si no lo hace está fuera de contexto. Y para rematarlo, adónde levanta la mirada sólo ve lo negativo y hasta sus compañeros de trabajo o de estudio se inclinan por lo mismo…

Sin embargo, la realidad no es así.  En su entorno si existen miles de jóvenes que hacen lo opuesto: respetan y aman a la familia, procuran acatar los valores morales y cristianos, se dedican con entusiasmo y perseverancia a estudiar o trabajar – dependiendo a que se dediquen-; desean superarse en todas las etapas de la viada, luchan por tener una casa, ejercer una profesión con éxito, formar una buena familia como Dios manda y otras cosas buenas.

Este mensaje es sencillo para la juventud actual. Únicamente existen dos caminos: aquel por dónde van los desdichados y frustrados de la vida, porque todo lo han perdido y las puertas del éxito se han cerrado; ya que siguieron todas las malas prácticas sin decir nada como ovejas al matadero… O  el camino del trabajo, la superación, la unidad y el amor de la familia, el bienestar personal y el respeto a las cosas de Dios.

La gran pregunta es: ¿Cuál escoges tú?

Pídele a Jesús mucha sabiduría y fuerza de voluntad para escoger el camino del bien, dónde está el amor de la familia, el trabajo, la superación, los valores morales y el bienestar personal.

Por: Eric Aragón

sábado, 1 de octubre de 2022

Un país pequeño, pero con una gran bendición

No es que sea un paraíso como lo era el Edén en un principio. Tiene una variedad de problemas como cualquier otra nación en desarrollo; sin embargo, cuando se hace una comparación con los demás países se descubre que aún Panamá goza de gran estabilidad económica, social y política.

Por esta pequeña franja de tierra conocida como el “Istmo de Panamá”, tanto los desastres naturales como las guerras y los conflictos extremos pasan de largo…si acaso dejan un leve recuerdo.

“Lo bueno no cae del cielo…” Hay que ganárselo con esfuerzo, sacrificio y constancia. Y este es el caso de Panamá. A pesar de ser un crisol de razas y de no escaparse de algunos problemas sociales, económicos y políticos, la nación panameña está fuertemente unida por la Fe Cristiana y profesa altos estándares de valores morales, principalmente el respeto y la defensa de la familia como se ha conocido tradicionalmente.

El panameño desde corta edad siente la fortaleza que ofrece el amor materno, que es puro e infinito; y está representado por el ejemplo y el amor que demostraba la Virgen María. Por otra parte, el hombre también desempeña un papel importante en su rol de papá. Los hijos panameños lo saben y en su mayoría adoran y admiran a sus padres.

Es sumamente difícil que la sociedad panameña se resigne a los cambios, que están ocurriendo en el mundo desarrollado en materia de familia tal como la conocemos desde la antigüedad.

Por más que se trate de justificar y se busquen todos los argumentos de este mundo, nada ni nadie puede sustituir a la mujer en su proceso natural y bendecido por Dios, para ser mamá.

“Solo de una mamá tal como la conocemos puede surgir una fuente inagotable de vida y de amor puro hacia sus hijos”. Y cuando le sumamos a esta fuente de vida, el amor y el buen ejemplo de un papá, acompañado de la Fe en Dios, entonces tendremos una familia poderosa e invencible, que siempre irá por el camino correcto y hará de este mundo un “mundo mejor”; donde la paz, el amor hacia el prójimo, la sabiduría y la unidad familiar se impondrán frente a tanta maldad, soberbia y agresividad de la sociedad actual, que ha logrado avances tecnológicos inimaginables, pero con grandes deterioros sociales.

Por: Eric Aragón

lunes, 29 de agosto de 2022

¿Cómo debería ser el comportamiento de los gobernantes del mundo?

Desde que estábamos en la escuela primaria se nos hacía mucho énfasis en el cumplimiento de ciertas normas, tales como, el respeto a las persona mayores, sentarse bien a la mesa, vestirse correctamente, divertirse sanamente y otras reglas más…

Los maestros explicaban con mucha sabiduría y ejemplos que el cumplir con estas normas era necesario, para que la convivencia entre seres humanos fuese más agradable y se pudieran enfrentar y superar todos los problemas que fuesen apareciendo, como parte normal del proceso de la vida humana.

Una buena imagen que se proyectara iba a tener mucha influencia en los demás y le daría a la persona mucha autoridad y liderazgo.

Así era la enseñanza de los grandes educadores de hace unas décadas. Hoy día es otra la historia. Las corrientes modernas del pensamiento, han cambiado esta enseñanza del pasado. Por todos los canales de comunicación tratan de cambiar estos valores en nombre de los derechos humanos y de la tesis de que la época actual requiere otras reglas que vayan más acorde con los tiempos.

Existen valores que jamás podrán cambiar por más que traten de tergiversarlos. Primero, porque las consecuencias de las prácticas opuestas a estas reglas tan sencillas como el diálogo, la unidad familiar y el respeto, se están viendo. Los líderes mundiales y la diplomacia no pueden ponerse de acuerdo, porque no practican el diálogo como debe ser; la conducta adecuada sin desenfreno y la buena inteligencia ya no forman parte de las cualidades que deberían tener los gobernantes actuales y las familias como las conocíamos ya están desapareciendo (por mencionar algunas). Y en segundo lugar, los mismos seres humanos cuando ya se dan cuenta de que la corrupción y desenfreno en todos los sentidos de la vida humana sólo traen muerte, destrucción e infelicidad: empiezan a clamar a un Dios que los ayude y a buscar el amor de la familia como la estableció la propia naturaleza.

La enseñanza de nuestros abuelos y maestros del pasado nunca pasará de moda, por más que traten de destruir este legado. Las personas que practican estos valores, en la actualidad tienen una vida mejor que aquellos que se dejan confabular por las corrientes modernas de corrupción y desenfreno.

Por: Eric Aragón