miércoles, 17 de marzo de 2021

Los albergues ¿Ambiente agradable o infierno?

Este es un problema más grave de lo que se piensa y que en las últimas décadas ha pasado inadvertido, casi invisible.

Las autoridades y la sociedad en general han preferido mirar para otro lado, antes que enfrentar la difícil situación.

Si se han levantado las voces en defensa de los animales con tal fuerza, que se tienen leyes que castigan con cierta dureza a los que maltratan a los animales, ¡cuánto más se debería proteger a los niños abusados en los albergues!

Las instituciones o casas dónde se reciben niños abandonados o maltratados, deben ser ambientes agradables, de modo tal que después de algunas semanas, el niño comience a sentir seguridad, un poco de alegría y reciba la adecuada terapia para crecer con la estabilidad psicológica requerida para insertarse a la vida social y laboral cuando cumpla su mayoría de edad.

Para cumplir con esta misión sagrada de ayudar a los niños abandonados y maltratados, en primer lugar, se deben nombrar directivos que entiendan que no se trata de un trabajo cualquiera; ya que hay vidas humanas cuyo futuro va a depender de las acciones administrativas que se ejecuten. 

Por otra parte, debe hacerse una selección adecuada del personal que va a atender a los infantes y la supervisión debe ser constante y no pasar por alto ningún detalle que pueda ser un peligro para los niños.

Los niños más débiles cuando llegan a los albergues son golpeados y abusados por los jóvenes de más edad, además del maltrato físico o psicológico de alguna persona que labora en estos lugares. La comida es desastrosa, los baños horribles y no hay suficiente vigilancia para evitar que los más fuertes atropellen a los más frágiles… Aparte de todo esto, a veces se mezclan mozalbetes con problemas delictivos con jóvenes que no tienen este tipo de perfil.

Ciertos albergues funcionan muy mal, pero a nadie le importa con el destino de los niños; lo único que les interesa es recibir donaciones del Estado y de los donantes particulares. Esto es una cruel estafa.

La conclusión es que, si se dan abusos repetidos durante años, tanto los directivos como el personal involucrado directamente en el problema, son responsables penalmente.


Por: Eric Aragón

martes, 16 de marzo de 2021

La mamá… ¡un ser insustituible!

 

No se trata de un simple nombre o de una imagen que se puede copiar.

Es un ser humano único, con características propias que la mismísima naturaleza se ha encargado de forjar, en aquellas mujeres que han recibido el privilegio sagrado de ser ¨madres¨.

Cada mujer que recibe el don de tener hijos como la naturaleza lo ha dispuesto, desde el inicio de la historia humana: no sólo su cuerpo se transforma para darle vida al nuevo ser (bebé); sino que ocurre en ella una serie de transformaciones espirituales y de sentimientos de amor y protección a sus vástagos, que es capaz de realizar los sacrificios inimaginables por sus hijos.

La mujer que ha recibido por la naturaleza el privilegio de ser mamá se convierte en una fuente de amor y equilibrio emocional para sus hijos.

Un ser humano -sea hombre o mujer- que haya recibido el cariño y protección de una madre, difícilmente tendrá inclinaciones a las atrocidades y depravaciones que observamos en la actualidad.

Por ejemplo, jóvenes que caen fácilmente en actos vulgares, delictivos o prácticas dañinas de todo tipo, podrían evitarlo si hubiesen recibido el amor y la buena enseñanza de una ¨mamá¨.

Los hijos necesitan un buen desarrollo físico y un crecimiento espiritual. Todo se consigue cuando se tiene una familia no perfecta, pero si funcional, dónde haya una madre amorosa y un padre responsable.

Por supuesto, parece una utopía lo de hogares funcionales; sin embargo, tengan la seguridad que un hijo, aunque viva en la pobreza extrema, si tiene el amor y los consejos de una buena mamá, tendrá más opciones de llevar una vida sana, honesta y de trabajo; y cuando cometa errores en la vida, tendrá la fuerza y sabiduría necesaria para levantarse y corregir su camino.

Las ¨MAMÁS¨, representan la fuente de amor como lo describe el libro de la Santa Biblia: 1 Corintios, capítulo 13; e igualmente el ¨EQUILIBRIO¨ que necesita el mundo para que no llegue a los excesos de corrupción, que se están viendo hoy día.

Por ésta y muchas razones más las verdaderas mamás no se pueden sustituir ni copiar… Están bendecidas por Dios y son parte importante de la naturaleza, porque representan el amor puro, que sólo puede provenir de Dios.

¡Qué Dios Bendiga a todas las maravillosas madres del mundo!

¡Hijos protejan a la familia y a sus mamás! Existen movimientos satánicos que desean destruir y sustituir a las familias y a las mamás formadas por la naturaleza y bendecidas por el Dios Altísimo.

Por: Eric Aragón

sábado, 13 de marzo de 2021

La familia, institución sagrada

 

En la carrera de ciencias políticas y en otras disciplinas relacionadas, siempre se estudia a la familia como la célula más pequeña del Estado.  Es decir, que todas las políticas públicas en materia social, tienen que partir de la familia.

Por ejemplo, para reducir la delincuencia, la deserción escolar o la violencia intrafamiliar, los gobiernos deben centrar sus esfuerzos en mejorar las relaciones familiares; en otras palabras, crear todas las condiciones necesarias para que haya menos desintegración familiar; ya que un niño que no recibe el amor y la estabilidad que proporciona la familia, se desarrollará con la autoestima baja y será presa fácil de la delincuencia y de la falta de interés por aprender un oficio y llevar una vida disciplinada y sana.

Por otro lado, tanto en las iglesias protestantes como en las católicas, se habla mucho de la ¨palabra de Dios y de la familia¨, pero ¿Cuánto esfuerzo realmente hacen para combatir todas aquellas ideologías y corrientes que pretenden socavar los cimientos de la familia?

Pareciera que a lo largo de todos estos años la humanidad no ha aprendido nada; y lo más triste es que millones de personas que crecieron en un hogar, recibiendo el cariño, sobre todo de la única e irremplazable ¨mamá¨, no levanten su voz con toda sus fuerzas para proteger a la institución más importante en la vida de cada ser humano: ¨La Familia¨.

La familia es una sola y no se puede sustituir ni alterar. La familia es una institución sagrada, bendecida por Dios y sustentada por la palabra divina (Santa Biblia). La mamá, nuestra mamá, es aquella mujer que Dios hizo y sigue creando por medios naturales; es esa mujer que desarrolla un amor sobrenatural por sus vástagos, y que ningún experimento o cosa extraña podrá reemplazar. Igual ocurre con el papá –es insustituible-, y más cuando los hijos quieren seguir sus pasos, porque (los papás) son inspiración de trabajo, responsabilidad, carácter, fuerza y disciplina. ¨Benditos sean los papás del mundo que desempeñan bien su papel¨.

La familia es una institución establecida por Dios. Todos aquellos que atenten contra ella, están desafiando directamente a Dios, así que no se quejen cuando la ira del Dios Poderoso venga contra todos esos movimientos que quieren destruir a la familia como Dios la instituyó, utilizando toda clase de razonamientos que van encaminados a lavarle el cerebro a millones de gente en todo el mundo, más que todo a los jóvenes que viven en un mundo de vanidad, sin ley ni orden, y con una fe cristiana casi inexistente.

¡Qué Dios nos salve!


Por: Eric Aragón

lunes, 22 de febrero de 2021

¨Dejad a los niños venir a mí…¨

Siempre se ha dicho que los niños son ángeles y estas palabras no están del todo alejadas de la verdad.

En cierto momento, cuando la multitud quería impedir que los niños se aproximaran a Jesús, El Salvador dijo: ¨Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos¨. Mateo 19, verso 14.

Indudablemente que estas palabras de Jesús nos revelan la importancia que tienen los niños para Él. Por lo tanto, todos los mortales se ven obligados a considerar a los niños como seres especiales.

Sin embargo, la situación que viven los niños a nivel mundial es totalmente opuesta al mensaje divino.

Tanto los gobiernos como la sociedad colocan a los niños en el último lugar de las prioridades.

Los gobiernos gastan miles de millones de dólares pregonando por todos los medios publicitarios, que trabajan en favor de la niñez; mas la realidad es otra.

Basta con inspeccionar los albergues donde se encuentran los niños abandonados o maltratados, para darnos cuenta que para los gobiernos y para la sociedad No Valen Nada. Todos son cómplices del peor de todos los males: ¨atentar contra la vida de los niños¨.

En Panamá, acaba de salir a la luz pública una serie de denuncias contra funcionarios e instituciones, que tienen el deber sagrado de velar por el bienestar de cientos de niños abandonados que están en albergues.

Las denuncias se refieren a violaciones, maltratos físicos y psicológicos y mala administración en varios albergues.

Existe una Declaración Universal de los Derechos de los Niños, que de una u otra forma ha sido acogida por la mayoría de los Estados.

Pero, en la práctica esto se convierte sólo en un discurso político y en pura propaganda; ya que los funcionarios gubernamentales y las instituciones, que deben salvaguardar la integridad y recuperación de los niños abandonados: No están cumpliendo con su responsabilidad constitucional

Algunos albergues privados no tienen ninguna supervisión, así que no se sabe aún que infierno pueden estar viviendo estos niños.

Puede que en este mundo la justicia sea selectiva y responda a intereses políticos, pero, tengan la seguridad que en el tribunal de Dios lo pagarán muy caro.

 

Por: Eric Aragón

martes, 29 de diciembre de 2020

El año en que se detuvo la Tierra...

 

El título de este artículo hace referencia a la película clásica de 1951, protagonizada por Michael Rennie The Day the Earth Stood Still”. En español “El día que se detuvo la Tierra”.

Una obra cinematográfica que formó parte de una variedad de películas relacionadas con la Guerra Fría, cuyos protagonistas eran la desaparecida Unión Soviética (URSS) y los Estados Unidos de América.

Lo interesante de esta película es que todas las actividades del mundo entero se paralizaron, producto de la llegada de un extraterrestre con poderes superiores a las armas de las potencias militares de la época.

Los habitantes terrenales entran en un caos y los gobiernos no se ponen de acuerdo… Así se ve el mundo en la película.

Era algo insólito que un mortal se atreviera a pensar hasta el año 2019, que el planeta Tierra se pudiera paralizar y aún peor que los habitantes del mundo quedaran confinados en sus casas por meses. 

Las grandes ciudades quedaron como un desierto. Los hospitales saturados de enfermos y gente fallecida por todas partes; en ciertos lugares los muertos sobrepasaron la capacidad de las morgues, que las calles se convirtieron en depósitos de cadáveres. 

No es una película de Hollywood, es la pura realidad que vivió el mundo a lo largo del 2020.

Absolutamente todas las actividades económicas, sociales, escolares… en fin, todo se paralizó a nivel mundial. Los seres humanos quedaron encerrados en sus hogares durante meses. Y después de este confinamiento, las actividades fueron irregulares, podemos decir: “que un paso hacia delante y diez hacia atrás…”

El mundo en un caos, los gobiernos sin ponerse de acuerdo, la pobreza y el desempleo aumentaron en forma descomunal; la incapacidad y la corrupción se multiplicaron a la velocidad de la luz; miles y miles de empresas desaparecieron. Por otra parte, un número significativo de la clase media y profesional quedó en el abismo financieroEsto y muchas calamidades más marcaron el año 2020.

Lo irónico es que no fue la Guerra Fría, ni siquiera un enemigo extraterrestre, el que puso al mundo de rodillas. Se trató de un virus de la familia de los que provocan la gripe (Coronavirus). Aunque invisible a simple vista, no era tan difícil de combatir. Con disciplina, medidas higiénicas y acciones contundentes de los gobernantes, se pudo controlar mejor su propagación; no obstante, el virus puso en evidencia la miseria en la cual vive la humanidad.

Una sociedad que no respeta a nadie y vive desenfrenadamente, como si fuesen los dueños del mundo.

El Coronavirus demostró que la humanidad es frágil y que si no cambia su forma de vivir vendrán Pandemias peores que la del 2020.

Empecemos a respetar los principios cristianos y morales, a la familia y a nuestros semejantes…

Por: Eric Aragón