Más de 2 mil años han transcurrido desde la muerte de Jesús;
sin embargo, la historia de su vida aún sigue contándose…
Por más que sus enemigos han tratado de alterar o
manchar su obra divina, con narraciones de ficción como aquellas relacionadas
al Santo Grial, a los Caballeros Templarios o una supuesta relación sentimental
con María Magdalena, lo cierto es que los Evangelios que relatan la historia de
Jesús cada vez se hacen más poderosos e influyentes con el pasar de los años.
Todo lo bueno de este mundo se está acabando a pasos
agigantados. Alguien alguna vez dijo: “Si desea conocer este pueblo venga
rápido, porqué se hunde…”
Nada más tenemos que vernos en el espejo de la
familia, institución que ya casi no existe como tal. Ésta se hizo a un lado
para que todo el “modernismo, la ciencia y la tecnología, acompañados por la
destrucción de los valores morales, el amor y la unidad familiar” tomen el
control de la humanidad, tal como ocurre hoy día ¡Sálvese quien pueda!
Parece irónico que los mortales estén sumergidos en la
inmoralidad, el desenfreno y la corrupción… y cuándo están al borde de la enfermedad,
miseria, muerte o llegan al límite que tiene todo ser humano, precisamente,
buscan lo que han estado negando: “el camino de la Fe Cristiana”.
Los evangelios
cuentan la historia del único personaje que tiene todo el poder, el amor y la misericordia para librar a los seres
humanos de sus miserias y proporcionarles verdadera paz y esperanza en un
mañana mejor.
Por: Eric Enrique Aragón