viernes, 7 de agosto de 2015

Feminicidios

Feminicidio  o femicidio: es un vocablo que se origina de la palabra inglesa “femicide”; y se define como el asesinato de mujeres, por el simple hecho de pertenecer al sexo femenino, considerado históricamente por muchos hombres como el sexo débil, sujeto a control absoluto (según éstos bárbaros y machistas).  Tanto así que los hombres con la complicidad obligada de las mujeres, crearon el eslogan: “Entre pelea de marido y mujer nadie se mete”. Un lema publicitario que pasó de padres a hijos, con el único propósito de justificar la violencia en todas sus manifestaciones contra las madres, hijas, niñas, esposas y todo lo que se mueva que sea del sexo femenino.

Se podría decir que gracias a los medios de comunicación -apoyados en los últimos años por el avance gigantesco de la tecnología- en la actualidad, se conocen cada vez más casos de asesinatos de mujeres, con toda la crueldad que se pueda imaginar. Lo irónico de todo es que a pesar de que la población en general y las autoridades de los diferentes países tienen conocimiento de estos hechos, las estadísticas de mujeres asesinadas con extrema violencia, en lugar de disminuir tienden a aumentar

En algunos países de América Latina, las penas de prisión se incrementaron considerablemente, al igual las campañas para minimizar la violencia contra la mujer; no obstante, la crueldad de los malos hombres contra las mujeres, no se detiene.

¿Y por qué no se reducen los femicidios? Porque siempre todo se hace mal, producto de las emociones del momento o de los gobiernos que ejecutan algunas medidas más con fines politiqueros, que con una verdadera intención de resolver un grave problema que afecta todos los niveles socioeconómicos de la sociedad.

Se trata de crear entre todos los sectores de la sociedad y el gobierno una política de estado, que genere planes y programas a largo plazo, pero, efectivos, para controlar este mal: que causa por año más muertes de las que se contabilizan y destruye la vida de miles de niños inocentes, que cuando crezcan, protagonizarán actos de violencia física y emocional contra las mujeres; y otros, sin lugar a dudas se convertirán en asesinos de mujeres.

¡Por supuesto! Aumentar las penas es importante; un castigo severo, frente a un acto de tanta crueldad y avasallamiento por tratarse de un ser más débil físicamente, sirve como un instrumento disuasivo. Sin embargo, para que esta acción tenga un impacto positivo en la sociedad (la mayoría de abusadores son hombres), debe acompañarse  de otros elementos, tales como: programas orientados a consolidar la unidad y los valores morales en la familia; campañas permanentes en los medios de comunicación y la incorporación del tema al sistema educativo, de manera tal que desde la niñez se aprenda a valorar y respetar a las mujeres.



Por:
Eric Enrique Aragón


lunes, 6 de julio de 2015

La Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos: “tomó una mala decisión…”

La Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos, el día viernes 26 de junio del año en curso (2015), declaró: “legales los matrimonios entre parejas  del mismo sexo -homosexuales y lesbianas- y las adopciones en todo el territorio nacional (50 estados)”.

Según el presidente Obama: “Esta decisión es una victoria para los demandantes… para las parejas… para sus hijos… para sus amigos y quienes les apoyan… Es una victoria para Estados Unidos”. Voz de América - 26.06.2015

Todos los seres humanos merecen respeto. Los homosexuales y lesbianas, también lo merecen… En consecuencia, y más si somos cristianos, jamás debemos hablar mal de ellos ni menospreciarlos; son hijos de Dios que están incluidos, al igual que todos nosotros, dentro de los planes de salvación de Nuestro Señor Jesucristo; ya que nadie es perfecto y llevamos una carga de pecados o realizamos acciones que van en contra de la Fe Cristiana.

La mayor parte de los millones y millones de habitantes de América y Europa, profesamos la Fe Cristiana, creemos en la palabra de Dios (La Biblia), asistimos a iglesias donde se predica el mensaje de salvación de Jesús. Iglesias donde se recomienda orar, ayunar y llevar una vida conforme a los Evangelios y a los preceptos cristianos.

Entonces ¿Cómo podemos explicar que nuestras acciones sean opuestas a las normas cristianas? Una respuesta sencilla. No somos verdaderos seguidores de la doctrina cristiana. Nuestro corazón (mente), está lleno de pensamientos superficiales y emociones dañinas, que nos sumergen cada vez más en una vida pecaminosa que destruye nuestras almas y a la institución más sagrada hecha por Dios: “La Familia”.

Para los que profesamos diariamente la Fe Cristiana, por medio de la oración, la meditación, el ayuno y la lectura de la palabra de Dios: El Espíritu Santo, nos da la certeza de que Dios jamás se equivocó, cuando hizo al “hombre” y a la “mujer”, y que éstos se unirían en sagrado matrimonio; y la mujer daría a luz hijos, formando así una linda familia bendecida por Dios.

Jamás un hijo adoptado por padres homosexuales o del mismo sexo, podrá tener mejor salud mental, física, emocional y espiritual, que hijos de parejas normales (hombre y mujer). La biblia, en los evangelios, señala que los homosexuales no podrán entrar al Reino de Dios.

Existe un claro ejemplo, del mal que se le causa a la familia, a la sociedad y al país entero, por la práctica abierta y masiva del homosexualismo y el lesbianismo. Véase el caso de Sodoma y Gomorra: dos pueblos que empezaron poco a poco, a permitir todas las prácticas contrarias a los preceptos cristianos, a la unidad familiar y a los verdaderos valores morales, entre las cuales estaba el homosexualismo. Después de un tiempo, todo el pueblo estaba corrompido: sin autoridad, sin Dios, y sin Ley…  

Estados Unidos es un país poderoso e influyente a nivel mundial, lo más seguro es que sea un gran ejemplo a seguir por la mayoría de naciones. No importa cómo se quiera justificar, lo cierto es que, la legalización del matrimonio gay, destruye la unidad familiar y va en contra de la Fe Cristiana.  Los escritos bíblicos tienen un poco más de 2000 años; el cristianismo empezó con el nacimiento de Jesús, en Belén ... y hasta la fecha nadie ha podido destruir ni la Palabra de Dios ni la Fe Cristiana ¿Por qué? Porqué Dios es real. El mismo Dios Todopoderoso del Antiguo Testamento y del Nuevo Testamento, es el mismo hoy día y siempre estará...

Debemos orar mucho para que Dios les abra los ojos a los homosexuales y lesbianas, de manera que se den cuenta de que están destruyendo a la familia establecida por Dios.

La mayoría -homosexuales- no nació con problemas biológicos (hormonales), sino, que por el camino se hicieron así (ellos mismos lo confiesan y los análisis médicos lo sustentan). Muchas razones influyeron: abandono, falta de amor de sus padres y por otras causas, que se pudieron evitar …  Merecen respeto y que los orientemos con el amor de Cristo, por el camino correcto, conforme a la Palabra de Dios.

¡Sí! La Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos, el presidente Obama, los políticos y todos los que están de acuerdo con estas prácticas homosexuales se equivocaron. Sería interesante, preguntarle a todos los que apoyan estás leyes, que son heterosexuales, si estarían dispuestos a entregarles sus hijos a matrimonios gay, para que sean educados por éstos.

"Dios los juzgará por estas leyes equivocadas…"



Por:                                                                                                                       Eric Enrique Aragón



miércoles, 17 de junio de 2015

“DIOS CUMPLE SU PALABRA”

No puedo pasar por alto ni dejar de pregonar al mundo entero, que las palabras bíblicas tienen poder. Indudablemente, son “palabras mágicas”, es decir, tienen vida…  

Ese Dios a quien millones y millones de personas en todo el mundo, le hacen reverencia, ayunos y oraciones; es más real de lo que piensan: “Tiene un poder infinito, adornado por la misericordia, la justicia y el amor perfecto hacia los seres humanos”.

Sin embargo, muy pocos experimentan el poder que tienen sus palabras recopiladas en varios libros (Biblia) y traducidas, casi a todos los idiomas del mundo, a lo largo de varios siglos.

La clave de todo radica en hacer oraciones -en medio del dolor que se está padeciendo- que le demuestren al Dios de Israel, que vamos a creer ciegamente en sus promesas.

CONFIANZA TOTAL EN SU PALABRA
“Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar…” Evangelio según San Mateo, capítulo 11, versículo 28.

¡Cuánto más aumente su dolor y angustia debido a su problema, clame más a Dios Padre y a Dios Hijo (Jesucristo)! ¡Dígale, tú no eres hijo de hombre para mentir ni hombre que se arrepienta, por tanto si tengo que morir así como estoy, lo acepto, porque creo con total firmeza y seguridad en tu palabra!  “TU PALABRA JESUCRISTO ES VERDADERA Y TIENE QUE CUMPLIRSE EN MI VIDA”

PODER DE LA ORACIÓN
“Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá; porque todo aquel que pide, RECIBE; y el que busca, HALLA; y al que llama, se le ABRIRÁ…” San Mateo, capítulo 7, verso 7.

JUSTICIA DE DIOS
“Bienaventurado el varón (entiéndase hombre o mujer) que no anduvo en consejo de malos; ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado; sino que en su Ley medita de día y de noche. Será como árbol plantado junto a corrientes de agua, que da su fruto en su tiempo, su hoja no cae y todo lo que hace prosperará…”   Salmo 1.

Las palabras de Jesús son leyes que se cumplen, traen salvación al alma, salud física y mental, prosperidad y unidad familiar; ellas tienen tanto poder que pueden intervenir en la vida cotidiana de los mortales. Todo depende del grado de fe que tenga cada uno de nosotros.

DECLARACIÓN DE FE

Con la plena confianza que tengo en Dios Padre y en mi gran amigo Jesucristo, les adelanto que para el mes de diciembre del presente año (2015), estaré publicando el libro titulado “DIOS CUMPLE SU PALABRA” (igual al título de este artículo).

La obra presenta una serie de hechos reales (testimonios), que demuestran como las oraciones con una fe ciega, cambian el destino de una persona.
El libro se estará vendiendo en la ciudad de México (D.F.).

Agradezco a Dios la misericordia y el amor que me ha demostrado; al igual que la sabiduría que me ha permitido entender de una vez por todas, que Dios es real y no simplemente una religión o una expresión simple y vana de fe cristiana…



Por:                                                                                                       
Eric Enrique Aragón                                                                                                                     

martes, 28 de abril de 2015

Levántate de las cenizas como el ave Fénix…

Ave de la mitología egipcia, cuyo tamaño se parece al de un águila, de colores variados, fuerte pico y garras. Tenía la gran cualidad de que podía resurgir de sus cenizas, cada vez que se consumía por el fuego: con gran poder y gloria.

En diferentes épocas y con bastante frecuencia se ha citado, en la literatura mundial, esta colosal acción del ave Fénix, de resurgir de las cenizas: como un mensaje de motivación para la humanidad

En medio de la abundancia, de la alegría o cuando la mismísima vida le acomoda todo tal como usted más lo desea: es fácil presumir de ser un ganador… Si fuese tan sencillo, en el planeta no habría un solo perdedor. Todos seríamos héroes, millonarios, felices; en fin, la vida de ensueño.

Sin embargo, en la vida real, las cosas no son tan fáciles como en las películas que todo se planifica y se controla.  El porvenir no se puede controlar.

Hoy podemos ser felices y mañana estar en medio del llanto; hoy podemos ver a nuestros seres amados y mañana puede que no estén en este mundo terrenal; hoy podemos tener un excelente trabajo y mañana estar sin él. Hoy podemos gozar de todos nuestros bienes materiales y mañana estar en la miseria; hoy podemos saborear una buena comida y mañana estar con hambre; hoy podemos estar rodeados de amigos y familiares y mañana estar en la completa soledad; hoy podemos tener un lugar para dormir y mañana estar en la calle; hoy podemos alardear de buena salud y mañana estar enfermos…

¿Quién puede controlar su futuro? Que yo sepa: ¡Nadie! Ningún ser humano lo puede hacer. Vivir desdichado no es fácil. En estas circunstancias todos nuestros amigos y hasta familiares se apartan. Así somos de malditos los seres humanos, que cuando vemos a otros en desgracia, los abandonamos o nos burlamos de ellos “hacemos del árbol caído leña”, en lugar de salvarlo.

La mayoría de los mortales, en estos casos, pierde la esperanza y no logra levantarse jamás de la desgracia… Y un grupo opta por el suicidio…

Hacer el último esfuerzo para superar esta amarga situación, no es fácil. Muy pocos lo han conseguido… Éstos son los verdaderos héroes. Se levantan como el ave Fénix…

"Únicamente nos queda clamar a Dios y esperar que nos llegue esa ayuda divina…"

Hacer el último esfuerzo no es fácil; pero, tampoco, imposible…





Por:                                                                                                         
Eric Enrique Aragón                                                                                                                      

domingo, 19 de abril de 2015

¡Cuidado! Ángeles podrían estar entre nosotros…

Hace poco, por casualidad me encontraba conversando con una amable señora en una iglesia muy famosa, aquí en la ciudad de Panamá.  Era una conversación muy corta; sin embargo, en cuestión de segundos, quedó la señora prácticamente haciéndome una serie de preguntas, como si yo estuviera en un interrogatorio.

¿De dónde es usted? ¿Qué hace aquí? ¿Dónde vive? Y otras preguntas más. Ahora recuerdo que la conversación giraba en torno al poder de Dios y cómo éste gran, único  y poderoso personaje mira a los seres humanos sin hacer distinción de nada; tan sólo basta que los mortales sean sinceros con él.

Dios me ha llevado a realizar distintos trabajos, como el de profesor de historia y uno de los pueblos antiguos que más me impactan, es precisamente, la del pueblo hebreo. Y de hecho escribo bastante sobre personajes bíblicos y otros aspectos más que tienen que ver con el poder motivador y restaurador de Dios.

El punto es que yo le respondía a la señora en broma y en serio, que yo podría ser un ángel de Dios, que camina sobre la tierra. Y todo el asunto cómo que se ajustaba bien a mi condición de vida; pues, no tengo familia en este país, y si alguna vez tuve, desde hace tiempo dejaron de existir. Yo era el más pequeño, un hermano rumano –por parte de padre- que me seguía, me llevaba más o menos 50 años de diferencia.  Perdí a mis padres desde muy pequeño –una gitana española y un aventurero rumano- y como si fuese poco, también, perdí a la única familia que formé, pues me abandonaron, por estar yo más preocupado por las cosas materiales de este mundo que son efímeras, que por mi bella y bendecida familia (¡Gracias a Dios están todos bien…!).

No es un cuento, en los evangelios, por ejemplo, en el libro de Mateos (cap.25), Jesús se refiere a la importancia de ayudar a las personas verdaderamente necesitadas; ya que si se les rechaza, Él (Jesús), hará lo mismo con todos aquellos que han desconocido la solidaridad y la bondad hacia los demás.

Piense un momento, incluso, analice bien la biblia y llegará a la conclusión de que Jesús y los ángeles que le sirven se pasean entre nosotros. ¡Quién sabe cuántas veces han tocado nuestra puerta! Y lo hemos rechazado por nuestro duro corazón…

Cuando tenemos la oportunidad de ayudar a otros y no lo hacemos, estamos cerrándole la puerta a Jesús.  No lo haga. Aún está a tiempo de enmendar su camino. ¡Dios bendiga a su familia y a usted!



Por:                                                                                                                    Eric Enrique Aragón