miércoles, 17 de junio de 2015

“DIOS CUMPLE SU PALABRA”

No puedo pasar por alto ni dejar de pregonar al mundo entero, que las palabras bíblicas tienen poder. Indudablemente, son “palabras mágicas”, es decir, tienen vida…  

Ese Dios a quien millones y millones de personas en todo el mundo, le hacen reverencia, ayunos y oraciones; es más real de lo que piensan: “Tiene un poder infinito, adornado por la misericordia, la justicia y el amor perfecto hacia los seres humanos”.

Sin embargo, muy pocos experimentan el poder que tienen sus palabras recopiladas en varios libros (Biblia) y traducidas, casi a todos los idiomas del mundo, a lo largo de varios siglos.

La clave de todo radica en hacer oraciones -en medio del dolor que se está padeciendo- que le demuestren al Dios de Israel, que vamos a creer ciegamente en sus promesas.

CONFIANZA TOTAL EN SU PALABRA
“Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar…” Evangelio según San Mateo, capítulo 11, versículo 28.

¡Cuánto más aumente su dolor y angustia debido a su problema, clame más a Dios Padre y a Dios Hijo (Jesucristo)! ¡Dígale, tú no eres hijo de hombre para mentir ni hombre que se arrepienta, por tanto si tengo que morir así como estoy, lo acepto, porque creo con total firmeza y seguridad en tu palabra!  “TU PALABRA JESUCRISTO ES VERDADERA Y TIENE QUE CUMPLIRSE EN MI VIDA”

PODER DE LA ORACIÓN
“Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá; porque todo aquel que pide, RECIBE; y el que busca, HALLA; y al que llama, se le ABRIRÁ…” San Mateo, capítulo 7, verso 7.

JUSTICIA DE DIOS
“Bienaventurado el varón (entiéndase hombre o mujer) que no anduvo en consejo de malos; ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado; sino que en su Ley medita de día y de noche. Será como árbol plantado junto a corrientes de agua, que da su fruto en su tiempo, su hoja no cae y todo lo que hace prosperará…”   Salmo 1.

Las palabras de Jesús son leyes que se cumplen, traen salvación al alma, salud física y mental, prosperidad y unidad familiar; ellas tienen tanto poder que pueden intervenir en la vida cotidiana de los mortales. Todo depende del grado de fe que tenga cada uno de nosotros.

DECLARACIÓN DE FE

Con la plena confianza que tengo en Dios Padre y en mi gran amigo Jesucristo, les adelanto que para el mes de diciembre del presente año (2015), estaré publicando el libro titulado “DIOS CUMPLE SU PALABRA” (igual al título de este artículo).

La obra presenta una serie de hechos reales (testimonios), que demuestran como las oraciones con una fe ciega, cambian el destino de una persona.
El libro se estará vendiendo en la ciudad de México (D.F.).

Agradezco a Dios la misericordia y el amor que me ha demostrado; al igual que la sabiduría que me ha permitido entender de una vez por todas, que Dios es real y no simplemente una religión o una expresión simple y vana de fe cristiana…



Por:                                                                                                       
Eric Enrique Aragón